La Selección Argentina Sub 23 ha vivido un debut tumultuoso en los Juegos Olímpicos de París 2024, al perder 2-1 contra Marruecos en un partido que se convirtió en un verdadero escándalo. Desde el inicio, Marruecos mostró su fuerza con un doblete de Soufiani Rahimi, poniendo a la Albiceleste en una difícil situación.

Argentina logró descontar gracias a un gol de Giuliano Simeone, lo que generó esperanza entre los aficionados. Sin embargo, la emoción del partido se tornó en caos cuando un grupo de hinchas marroquíes arrojó una bomba de estruendo, provocando una invasión de campo y una interrupción de dos horas.

Una vez reanudado el juego, el VAR intervino y anuló el gol de Cristian Medina, que había igualado el partido, debido a un offside previo de Bruno Amione. Con el tiempo en contra y sin la oportunidad de revertir la situación, la Albiceleste se retiró del campo con un duro golpe.

Ahora, Argentina debe enfocarse en su próximo desafío contra Irak, tras la sorprendente victoria de los asiáticos sobre Ucrania por 2-1. La Selección Sub 23 se encuentra en una encrucijada y deberá reaccionar rápidamente para seguir en la competición.