La policía austriaca detiene a un grupo de adolescentes tras descubrir un complot terrorista.

La seguridad en Viena se ha visto comprometida por un posible atentado contra Taylor Swift. Un adolescente iraquí de 18 años fue arrestado en la capital austriaca. Formaba parte del círculo de un joven austriaco de 19 años, al que se le atribuye la planificación del ataque.

El principal sospechoso, simpatizante del Estado Islámico, tenía la intención de llevar a cabo un asalto mortal durante uno de los tres conciertos programados. Las autoridades encontraron explosivos y un arsenal de productos químicos en su casa en Ternitz.

         Los conciertos programados para el jueves, viernes y sábado fueron cancelados por razones de seguridad. Los fans expresaron alivio, miedo y angustia tras las noticias. La policía también detuvo a otros dos adolescentes, de 17 y 15 años, ligados al plan. El de 15 años fue liberado y se considera testigo.

         Este incidente pone de relieve el riesgo del adoctrinamiento en línea, especialmente entre los jóvenes. Las agencias de inteligencia de varios países colaboraron para desmantelar esta amenaza.